Cuando se brindan espacios nuevos de comunicación para las mujeres, se enraíza la esperanza dentro de los corazones de quienes forman parte de dichos espacios, se reafirman los aprendizajes y se reivindican libertades y derechos.
El pasado 16 de diciembre de 2022, gracias a la iniciativa de Stay Curious Club y Avant.Dev, se celebró la primera edición del conversatorio “Manos de Mujer”, en el Senado de la República en la Ciudad de México.
Este conversatorio se tornó bastante vital pues todo el conocimiento que se compartió provino de la voz de mujeres maestras de su profesión y de sus propias vidas.
Se demostró que la sensibilidad puede desprenderse de cualquier facultad, pues desde cualquier materia se puede lograr dar luz a las dolencias. Alumbrar nuestros caminos puede ser más fácil a partir de nuestros pasatiempos o de nuestras carreras profesionales, ejerciendo a la vez nuestros derechos y libertades para librarnos de la sombra patriarcal, una sombra que no es más grande que nuestra fuerza y nuestra sabiduría.
Como mujeres, conectamos con el dolor y nuestra historia de una manera profunda, por lo que es necesario transmutar nuestro sentipensar de una forma saludable, tal como hace Claire Becker en sus esculturas, Brenda Lozano con sus novelas, K’ antunil Alcyone Arriola Salinas en el ámbito legal, Rebeca Leal Singer en su obra poética o Julia Bravo Varela con sus narrativas.
Cada exposición se tornó un diálogo con palabras guiadas por el amor, equilibradas por la responsabilidad y la observación de los fenómenos sociales que como mujeres nos afectan. Tal fue el caso de Gabriela Enríquez Guerra, comunicadora y activista, quien nos compartió que aún persiste en su denuncia de la violencia vicaria y sigue de pie dispuesta a poder tener de vuelta a sus hijos con ella.
Después de escuchar hablar a Tania Ramos Beltrán, puedo escribir con seguridad, que las mujeres están destinadas a triunfar tras haber crecido bajo el dolor. Puesto que en el presente, en espacios como este, se está enseñando sin deber alguno todo lo que fue necesario para ese crecimiento desde nuestra realidad como mujeres.
Nosotras ponemos nuestro arte al servicio de cualquier persona a quién le resuene; así mismo, ofrecemos nuestra fortaleza, nuestra lucha, nuestra sabiduría y nuestra empatía.
Para poder enseñar, necesitas vivir lo opuesto a tu solución. Necesitas vivir el problema, porque solo así encontrarás el veredicto con el que lograr sanar. En este conversatorio, se comentó acerca de la premisa de que “lo personal es político”, premisa que me parece verdadera y me hace pensar que se practica de la misma forma en la cuestión espiritual, cuando hablamos de sanar: "si sana una mujer, sanamos todas”.
Este es un efecto de ondas que se expande. Siempre es bueno compartir nuestras respuestas, ya que vivimos en un mundo donde existen muchas preguntas.
Las obras de las manos de mujer, son un nodo en el que puedes seguir confiando para encontrar entendimiento y empatía. Las manos de mujer crean, cuidan, abrazan, enseñan y brindan calor ante la fría crueldad.
La obra de las manos de mujer es un símbolo de la verdad hablada desde el amor.
Información del evento
Redacción
Elizabeth Morfin. Comunicóloga y periodista por la UNAM, le gusta observar y escribir. Le gusta describirse como poeta porque la poesía la ha encontrado en lugares, los lugares más recónditos del mundo y le ha ayudado a salir de ahí para que la sigaescribiendo. Sus poemas son íntimos, así como los aprendizajes dentro de estos. Encuentra mucho valor en compartir lo que escribe, por lo tanto, ha participado en torneos de Poetry Slam, donde ha sido concursante y representante en diferentes etapas. A través de sus palabras se permite vulnerarse sin miedo alguno. Sus palabras son su fuerza y al mismo tiempo su lugar seguro.
Edición y corrección
Marshiari Medina Directora de la revista digital Teresa Magazine, escritora y traductora. Aficionada del chocolate, vive en una geometría cósmica hecha de mundos gobernados por lógicas pop no-euclidianas.